Mis anhelos se deshidratan con la duda de tu interés.
No intento mas, porque solo conozco lo que ves.
Auténticamente fiel a los pasos que hasta hoy he dado con mis pies; no necesito mas para sentirme bien. Lo que no se, lo quiero aprender, sin tener que pretender ningún placer. A veces reiré otras simplemente llorare, mas no te asustes al creer que culpar a tu mirada pueda provocarme decaer. Si me ves no alardees cuando voltee y mi rostro sonrojees. No es mi intención cautivarte, solo conocerte delicadamente, para transformarte en híbridos personajes que llevo en mis tendencias a imaginar.
Si era por ti, dejara de serlo.
Si me ves aquí, dejaras de hacerlo.
Si te vas de mi, yo me iré de ti.
Olvido rápido cuando se trata de herir.
No me arrepiento de haberte dejado partir,
porque a la larga,
no fui yo la que huí.
Y sin mentir, no me arrepiento de nada,
mientras pueda existir en el éxtasis de vivir.
martes, 9 de octubre de 2007
El precipicio de la indiferencia.
Publicado por Selva Graciani en 15:43
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Las Barajas de la Abuela
About Me
- Selva Graciani
- No soy solo una autora... Suelo columpiarme entre diferentes personalidades para darle vida a facetas que no conocia sobre mi ayer, mi hoy y mi mañana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario