A veces confundimos desvíos con desvivo.
No vemos:
Que persistiendo también nos rendimos,
que no todo llega cuando quieres, ni se va sin protestar,
y que soñar...muchas veces…es mejor que la realidad.
Que cuando logramos, lo que no pensamos,
lo disfrutamos mas que cuando refutamos.
Lo inesperado es un regalo mientras,
lo premeditado es un recargo.
Por eso:
No rechazo ninguno de tus actos,
ni critico lo que hagas con tus pasos.
Prefiero apagarme en lo que callo,
a responderte lo que has dudado.
jueves, 1 de noviembre de 2007
.Me acechan las serpientes de desear una vida decente.
Publicado por Selva Graciani en 22:32
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Las Barajas de la Abuela
About Me
- Selva Graciani
- No soy solo una autora... Suelo columpiarme entre diferentes personalidades para darle vida a facetas que no conocia sobre mi ayer, mi hoy y mi mañana.
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